El Bolton no está pasando por su mejor momento y eso lo demuestra la décimo octava posición que ocupa en estos momentos en la Premier League. Pocos aficionados Trotters pueden decir en estos momentos que el Bolton apuesta por la Premier, pero por lo menos quieren que su equipo aguante la permanencia. Por ello, los últimos días del 2009 fueron algo revueltos ya que se despidió al que había sido el entrenador del club los dos últimos años, Gary Megson.La afición pedía la cabeza del técnico desde hace tiempo, pero el club esperaba una reacción del equipo a base de victorias, victorias que no llegaban y que finalmente hicieron que el ex jugador del Manchester City, entre otros, fuera despedido. Su puesto lo ocupa actualmente Chris Evans y Steve Wigley, quienes se harán cargo de la plantilla hasta que la directiva consiga fichar a un nuevo entrenador.
Uno de los nombres que ha sonado para el Bolton es Owen Coyle, actual entrenador de Burnley, conjunto que acaba de ascender a la Premier League y lleva dos puntos más que el Bolton. Pero lo importante de Owen Coyle es que el año pasado llevo al Burnley hasta la máxima categoría inglesa por primera vez en su historia, algo en lo que se fijaron muchos equipos como el Celtic de Glasgow, conjunto que le ofreció trabajo este verano.
Ahora es el Bolton el que se quiere hacer con sus servicios. Además, el técnico escocés conoce bien la filosofía de los Trotters, ya que jugó en el Bolton durante dos temporadas (1993-1995), en las que marcó doce goles. Pero en el Burnley no están muy de acuerdo con su salida, ya que eso significaría encontrar un nuevo entrenador y, sobre todo, perder al que te ha llevado hasta la Premier League.
Parece que habrá que esperar para saber el futuro de Coyle, aunque la directiva del Burnley ya ha publicado en su página oficial que Owen Coyle está manteniendo conversaciones con el Bolton Wanderers por la vacante que ha quedado en el banquillo del Reebok Stadium.
