
Glenn Whelan, hombre del partido y autor del gol del Stoke City, fue una auténtica pesadilla para Patrick Vieira. El jugador irlandés creció en las categorías inferiores del City y ayer se vengó de que en su día no le otorgaran una oportunidad. Aunque en la primera parte no hubo goles, ambos clubes lo intentaron con poco acierto. El City echó de menos la garra en ataque de Tévez, un seguro en la apuesta por el Mundial de Argentina, el cual no jugó por razones familiares.
En la segunda mitad, las cosas se pusieron fáciles para los de Mancini cuando Abdoulaye Faye fue expulsado con una roja directa bastante severa en el minuto 53. Esto hizo que el Manchester City dominara un poco más sobre el Britannia Stadium, pero no lo suficiente como para adelantarse en el marcador. Tuvo que ser Whelann el que le diera un poco de emoción al partido con un gol desde fuera del área ante el que Shay Given pudo hacer bastante más.
Adebayor tuvo ocasiones para empatar, pero ya cerca del final, y con Mancini desesperado en la banda, fue Barry el que dio un empate más que dramático a un Manchester City que se coloca cuarto en la tabla clasificatoria con un punto más que el Liverpool y un partido menos. Los objetivos de los citizens se van cumpliendo, aunque su juego deberá mejorar si quieren estar en esa posición a final de temporada.