Dos puntos separaban al Blackpool del descenso antes del partido de ayer y por ello, los chicos del gran Ian Holloway se emplearon a fondo para poder sobreponerse a un Tottenham que llegaba demasiado subidito tras sacar petróleo de San Siro. La baja de Van der Vaart se notó demasiado en el equipo de Redknapp, el cual no debe relajarse si quiere estar entre los 4 primeros a final de temporada.
El Blackpool se adelantó en el marcador gracias al gol de Charlie Adam, curiosamente una de las apuestas en el mercado de fichajes de los Spurs, quien materializó la pena máxima de la que dispuso. DJ Campbell prácticamente dejó el duelo sentenciado antes del descanso y en la segunda mitad, Brett Ormerod, que salió desde el banquillo, dejó claro que los tres puntos se quedaban en la localidad costera de Blackpool. Pavlyuchenko hizo el de la honra poco antes del final. El gol de jugador ruso no sirvió de nada y el Tottenham perdió, en este partido aplazado por las malas condiciones vividas en Inglaterra en el mes de diciembre, la oportunidad de asaltar la tercera plaza.
No está todo perdido y por el momento hay opciones, además de estar viviendo un sueño en sus apuestas por la UEFA Champions League, ya que la victoria por la mínima sobre el AC Milan parece un paso muy grande para colarse en los cuartos de final, aunque personalmente creo que el resultado es algo justo y todo se decidirá en White Hart Lane.
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