Debo reconocerlo, soy bastante fan del Liverpool y por ello estoy contento con la mejora que ha realizado el equipo en el tramo final del curso. Estaba claro que con Roy Hodgson algo no funcionaba, pero con Kenny Dalglish, Anfield ha vuelto a sonreír. El técnico escocés consiguió transmitir esos valores que hicieron al Liverpool grande durante los años 80 y así poder levantar una temporada que sinceramente veía bastante negra para el bando Red. Alguna casa de apuestas no daba al Liverpool en puestos europeos por estas fechas, pero los buenos resultados y el gran momento que viven jugadores como Maxi Rodríguez, autor de tres de los cinco goles que ayer marcó el Liverpool en la capital inglesa, han hecho que Europa sea una realidad en Anfield.
Los otros autores de los tantos en Craven Cottage fueron Luis Suarez y Dirk Kuyt, jugadores claves también en la segunda vuelta, sobre todo el holandés, quien junto con el portugués Raúl Meireles han sido los jugadores más regulares de la campaña 2010/11. Me gustaría destacar también el papel que han tenido algunos canteranos, como el lesionado Martin Kelly, Jay Spearing, quien al final ha conseguido formar un centro del campo sólido junto a Leiva (nunca di un duro por el brasileño) o por ejemplo Flanagan, quien ayer jugó a pierna cambiada y demostró que por el momento la zurda la tiene de apoyo.
En estos momentos el Liverpool es quinto con un partido más que el Tottenham, equipo que se la juega hoy frente al Manchester City en partido aplazado. La derrota de los Spurs significaría que el Liverpool dependería de sí mismo para confirmar las apuestas UEFA de cara a la campaña que viene.