Su historia como futbolista inició en 1998 al lado de un equipo de la República Checa llamado Baník Ostrava. Allí duró tres años para pasar a un fútbol de mayor competitividad, pues en la temporada 2001-2002, el Liverpool decidió ficharlo debido a las buenas condiciones que Baros mostró en su equipo y las Selecciones juveniles de la República Checa.
Sin embargo, su más alto pico llegó en 2004, donde representó a su Selección en la EURO Copa y salió como el máximo goleador de la competición. Velocidad, agilidad, inteligencia y definición, eran las condiciones más sobresalientes de este hombre de 27 años, pero no las pudo ratificar a nivel de clubes.
Su momento en el Liverpool duró hasta 2005, ya que fue fichado por el Aston Villa por falta de oportunidades, pero allí apenas pudo demostrar cosas y fue enviado al Lyon; equipo donde se pensó que su mejor nivel regresaría; sin embargo, problemas personales no dejaron que la carrera de este jugador de 27 años avanzara. Regresó en principios de 2008 a la Premier League, para jugar a préstamo en el Portsmouth y con alguno de sus goles ayudó al equipo a mantenerse en la mitad de tabla.
Claude Puel lo declaró transferible al no entrar en sus planes para la actual temporada, y de allí fue que la oferta del Galatasaray, casi 5.000.000 de euros, fue aceptada por los franceses. Sin duda alguna, más que un nuevo equipo para Baros, era un campanazo de atención: la carrera de aquél goleador de 2004 se estaba echando a perder.
Actualmente, Milan Baros es el goleador de la liga turca con 15 goles, en 19 partidos, y es una de las razones del por qué el Galatasaray está formado por jugadores que en algún momento fueron tema de qué hablar: Harry Kewell, Morgan de Sanctis, Fernando Meira, Tobias Linderoth, Lincoln, Hasan Sas y Shabani Nonda.
¿Será que veremos de nuevo la mejor versión de Baros en un futuro próximo? ¿O su carrera ya está destinada a ser pasada por desapercibido entre el fútbol de élite?
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